No soy yo,
Eres tú,
Que no dejas de pasar por mi mente,
Que dormiste a mi lado,
Y me despertabas con tu mano en mi pecho,
Que descubriste mis debilidades,
Y yo en venganza te mordía cada uno de tus lunares.

Eres tú,

Que montaste más que una guerra,
Una revolución,
Revolucionando mi habitación,
Mi cama,
Mi alma.

Eres tú,

Que me quitaste la resaca,
Y la ropa,
Y jugamos al escondite de la ropa en el suelo,
Y como siempre,
Pierdo.

Eres tú,

Que te envidian las pesadillas porque ya no descontrolan mi mente,
Y Morfeo se ha aliado con el insomnio para soñar despierta.

Eres tu,

Esa magia explosiva desarrollada en mí aún sin diagnosticar.

Hoy me he levantado con un hambre caníbal,

Y no es de carne muerta.

Comentarios

Entradas populares de este blog