Me hubiera gustado conocerte,
si, a ti, ojitos verdes.

Me hubiera gustado conocer tus matices de color con la luz del sol, ese que desconocimos.
Me hubiera gustado ponerte conmigo la nariz de payaso, y empezar una nueva comedia.
Me hubiera gustado contar tus lunares, tocarlos, unirlos con la línea imaginaria de mi conciencia.
Me hubiera gustado quedarme abrazada a ti después de cada polvo, acariciarnos, mirarnos a los ojos, hacernos cosquillas, volver a jugar con la boca.
Me hubiera gustado ir a cenar al sitio que me habías prometido, ese sitio tan vintage, ese que siempre había querido ir pero aún no había podido.

Me hubiera gustado que me abrazaras,
me hubiera gustado que en cada despedida volvieras a tocar y me hicieras muecas, despedirnos con una sonrisa.
Me hubiera gustado que cada "cuando llegue, te aviso" me avisaras, y dejaras de dar señales de vida hasta que tu cuerpo no te lo pedía.

Me hubiera gustado saber de que pie cogeas, para enderezarte.
Me hubiera gustado saber tu color favorito, yo que sé, 
me hubiera gustado saber todo de ti.

Me hubiera gustado hacerte reír, hacerte feliz.

Pero nunca he tenido el derecho de intentarlo.
Ni tu has querido, ni yo he podido.

El pasado aún sigue sin arder, y sin ganas de prenderle fuego.

Comentarios

Entradas populares de este blog